Evaporadores para cámaras frigoríficas y heladeras comerciales
Evaporadores para cámaras frigoríficas y heladeras comerciales
Rendimiento constante
Garantiza la temperatura ideal en toda la cámara
Mantenimiento sencillo
Componentes accesibles que facilitan la limpieza
Bajo nivel de ruido
Que favorece un entorno de trabajo más cómodo.
Compatibilidad con distintos refrigerantes
Adaptable a diferentes tipos de gases
Protección anticorrosión
Resistente a ambientes húmedos
Distribución de aire uniforme
Evita zonas con diferentes temperaturas
En Panel Pur sabemos que, si trabajás con alimentos o productos que dependen del frío, tu cámara frigorífica es el corazón de tu negocio. Y dentro de ella, el evaporador es el que hace la magia: toma el calor que sobra y lo transforma en frío para mantener todo en la temperatura justa. Sin un buen evaporador, la cadena de frío se corta y los riesgos (y las pérdidas) aparecen enseguida.En Panel Pur nos dedicamos a diseñar e instalar cámaras de frío para congelados que realmente funcionen para cada cliente. No importa si tenés un negocio chico o una industria de gran escala: lo hacemos a medida. Y la verdad es que, más allá de la eficiencia energética (que también importa), lo que nos obsesiona es que tus productos lleguen en excelente estado: con su sabor, textura y propiedades como el primer día.
¿Qué es y cómo funciona un evaporador industrial?
Imaginá entrar a la cámara y sentir ese aire frío que te da tranquilidad. Eso es obra del evaporador. Está ahí adentro, trabajando en silencio: el refrigerante circula, cambia de líquido a gas, y en ese proceso “roba” el calor del ambiente para enfriarlo.
En la práctica, esto significa tres cosas muy claras:
- El ambiente baja a la temperatura exacta que tus productos necesitan.
- La cadena de frío se mantiene firme, sin fugas que después se traduzcan en pérdidas.
- Los alimentos conservan sus propiedades, sin riesgos de deterioro.
Qué hace especiales a nuestros evaporadores
Nos gusta fabricar equipos que trabajen todos los días sin darte dolores de cabeza. Por eso:
- Tienen cuerpos y serpentines resistentes a la corrosión, que aguantan años.
- Ventiladores potentes y silenciosos, que reparten el aire frío parejo.
- Sistemas anti-hielo y bandejas de drenaje, porque nadie quiere agua acumulada en la cámara.
- Acceso fácil para limpieza, para que el mantenimiento no sea un problema.
En frío industrial, la confianza se gana así: equipos robustos que funcionan sin sorpresas.
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¡Tu negocio merece mostrarse mejor!
Tipos de evaporadores y dónde se usan
No todos los negocios necesitan lo mismo. Por eso tenemos evaporadores para cámaras frigoríficas y para heladeras comerciales, pensados según el tamaño y el ritmo de trabajo de cada instalación.
Algunos puntos que los hacen prácticos:
- Hay distintos tamaños y diseños para que encajen sin complicaciones.
- La distribución de frío es uniforme, evitando esas esquinas que siempre quedan más tibias.
- Funcionan perfecto en industrias de alimentos, supermercados, hoteles o depósitos logísticos.
En pocas palabras: donde necesites frío confiable, ahí puede ir un evaporador nuestro.
Accesorios y detalles que suman valor
Si querés exprimir al máximo la eficiencia de tu cámara, podés sumar accesorios como:
- Resistencias de deshielo eléctricas o por gas caliente, para evitar bloqueos de hielo.
- Sensores y termostatos precisos, que mantienen la temperatura exacta sin gastar de más.
- Rejillas y protectores, que cuidan tanto al equipo como a tu personal.
- Kits de instalación y soportes adaptables, para que todo quede firme y seguro.
Son esos pequeños detalles los que hacen que el consumo energético baje y tu mercadería dure más.
Asesoramiento y acompañamiento de principio a fin
En Panel Pur no solo vendemos evaporadores industriales. Nos gusta involucrarnos: escuchar qué necesitás, ayudarte a elegir el modelo ideal, instalarlo sin complicaciones y quedar cerca por si mañana necesitás mantenimiento o un ajuste.
Si querés que tu cámara funcione sin sobresaltos y con el mejor rendimiento, charlemos. Un buen evaporador no solo enfría: te da la tranquilidad de que todo está bajo control.
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